A 10 AÑOS DE LA SANCIÓN DE UNA LEY VANGUARDISTA. Avances y deudas…
El 9 de mayo de 2012 se sancionó la Ley N° 26.743 de Identidad de Género en la Argentina. Diez años pasaron de esta ley pionera en el mundo, que reconoce el derecho de las personas a ser inscriptas en su DNI acorde con su identidad de género autopercibida; que señala la responsabilidad del Estado de resguardar el acceso a la salud integral de las personas travestis y trans y que promueve el derecho al trato digno tanto en los ámbitos públicos como privados.
La sanción de esta ley fue fruto de la lucha y el activismo de organizaciones trans/travestis y constituye una conquista para un colectivo históricamente vulnerado y con un promedio de edad que no supera los 35 años. La celebramos porque implica un avance en cuanto ampliación y garantía de derechos.
Sin embargo, aún hay grandes deudas. Los tratamientos médicos y quirúrgicos y la atención hospitalaria integral aún hoy no están plenamente garantizados. Como agravante, el acceso a la consulta muchas veces se ve limitado por actos discriminatorios, por el trato desigual por parte del personal de salud y por la falta de consultorios amigables en muchas localidades del territorio nacional.