Esta jornada de lucha invita a lxs Trabajadores de la Educación a una profunda reflexión en torno a los 40 años de la vuelta a la democracia, y esto nos debe llevar a la indagación del concepto ¿Cómo es la democracia que vivimos? ¿Qué valoramos de estos 40 años? ¿Qué democracia queremos?
Es importante que pensemos hoy desde nuestro presente y nuestras luchas cotidianas, las reivindicaciones del conjunto de la clase trabajadora. Pensar el presente con perspectiva histórica nos permitirá proyectar el futuro. El ejercicio de la memoria nos remite a los 30.000 desaparecidos, el terrorismo de Estado, la dictadura cívico militar más sangrienta de la historia argentina, las luchas de Madres, Abuelas de Plaza de Mayo e hijxs de desaparecidxs y de los presxs politicxs. En estos 40 años de democracia la búsqueda de verdad y justicia no ha cesado y con ella seguimos comprometidxs.
La Asamblea General de las Naciones Unidas en 2010, proclamó el 24 de marzo, como el Día Internacional del Derecho a la Verdad en relación con Violaciones Graves de los Derechos Humanos y la Dignidad de las Víctimas. Se fortalece así la promoción de la memoria y reflexión permanente en torno a un aspecto clave para nuestra historia reciente. Recordar a las víctimas, y luchar por alcanzar justicia para ellxs, es un deber irrenunciable que involucra el conocimiento pleno sobre los actos de violación que se produjeron, las personas que participaron de ello y su móviles. El Estado no solo debe garantizar que se efectivice el cumplimiento de los derechos humanos, también es su obligación realizar investigaciones eficaces y brindar reparaciones fomentando prácticas democráticas reales y concretas para todo el pueblo.
Parte de nuestra tarea diaria como sindicato debe ser acompañar y reivindicar la lucha de familiares y de toda persona/colectivo en defensa de los Derechos Humanos, así como rendir homenaje a las víctimas de las graves violaciones a los mismos por la memoria, la verdad y la justicia. En este sentido nos encontramos realizando en las Regionales Sur y Este, un reconocimiento a docentes dadas de baja en mayo de 1976 como consecuencia de la persecución política que llevó adelante la última dictadura militar. La cultura del Nunca Más debe ser instalada, debe ser puesta en práctica, debe ser ejercida por todxs.
Necesitamos de un constante ejercicio de memoria crítica reflexiva, dado que A 40 AÑOS DE LA CAÍDA DE LA última DICTADURA cívico-militar, aún hay represión, aún hay persecución, aún hay espionaje y aún hay quienes insisten en volver a instalar el terror contra quienes luchamos diariamente por una sociedad justa y equitativa para todxs.
LUCHAR NO ES DELITO, por ello debemos denunciar cada vez que se procesa o juzga a luchadorxs del campo popular. DECIMOS NO A LA CRIMINALIZACIÓN DE LA PROTESTA y a la pretensión de silenciar a quienes resisten la implementación de políticas neoliberales de ajuste antipopular y entregan soberanía obedeciendo mandatos del FMI, tal como lo hicieron lxs 30.000 compañerxs detenidxs desaparecidxs.
MANTENEMOS VIVA LA MEMORIA DE NUESTRAS COMPAÑERAS MARÍA CRISTINA Y JORGELINA
SUMAMOS NUESTRA VOZ POR MEMORIA VERDAD Y JUSTICIA